El taller de Ricardet

Después de un fin de semana más que provechoso, os mando unos ‘afoticos’ de mi antro. Se trata de una nave de unos 350 metros, situada a medias entre lo que queda de zona agrícola y zona urbana.
De ello, se tabicó un espacio de unos 85 metros, que son los que he dejado como taller. El resto lo utilizo para dejar las motos de más uso, y los aperos agrícolas.
Dispongo además, de dos habitaciones, que las utilizo de momento para aprender a pintar y cosas parecidas.

Estas son la puerta de acceso, una grande abatible para entrar los cacharros, y la otra más pequeña de uso habitual. Vista del espacio para motos de uso habitual. A la izquiera, las dos habitaciones. Aquí tenemos una vista frontal del taller. Otros espacios….. Tablero principal, y banco. Aquí os presento a mis ayudantes. Espacio reservado a la preparacion y elaboración de los almuerzos para cuando Su Excelencia Tio Gilito tenga a bien hacerme una visita. Esta invitación se hace extensible a todo aquel que quiera venir. Vista de la parte trasera. Me queda mucho espacio por llenar. Pero todo llegará……. En el techo, tengo instalados doce colgadores como los de la foto. Me vienen bien, porque me sirve para poder sujetar algunos artilugios o piezas de poco peso, como pueda ser la lámpara, o sujetar un chásis, o cualquier herramienta. Pues esto es todo. Lo mejor, es que antes lo tenía montado en el garaje de casa. Poco espacio, visitas de los vecinos que me lo trasteaban todo. La parienta detrás de mí con la escoba y el mocho para que no ensuciara. Ahora lo tengo a escasos diez minutos de casa, en medio del campo, buena combinación. Encima ahora me han puesto el Leroy a escasos doscientos metros. Cuando no estoy con las motos, tengo un trozo de terreno donde siembro y planto toda clase de hortaliza para casa y los amigos. Tengo animales, etc… en fin …. que sólo me falta tener más tiempo para disfrutarlo. Pero todo se andará….