Espárragos de una Guzzi Z98
Los espárragos tenían restos de pintura negra, por lo que es de suponer que así venían de fábrica, máxime que se ven a través de las aletas del cilindro.
Por Enrique Carrasco
Para empezar coloqué el espárrago en el taladro de columna y con una tira de lija los pulí y en pocos minutos estaban casi relucientes.
Quedaban pequeños restos de óxido en las zonas donde había calado más, por lo que decidí pasarle una brocha con un producto ácido que me dio un amigo fontanero y que utiliza para quitar el óxido a las piezas, también sirve salfumán. Después le pasé un trapo empapado en disolvente para quitar cualquier resto de grasa.
Se protegen las roscas con cinta de carrocero y se cuelgan en un sitio adecuado para pintarlas. En esta ocasión utilizo pintura anticalórica que aguanta 600 grados.
Se procede a pintar dando dos capas muy finas y se espera una hora para que se seque al tacto.
Luego se mete una hora en el horno a 160 grados para endurecer la pintura.
Y el resultado final.
Por Enrique Carrasco